🤓 Autodidactas Generacion Z 🔥

Saturday, 18 July 2020

Controlar los gastos mejora las ganancias

Diversos factores pueden afectar las ganancias de tu negocio, uno de ellos es la falta de un buen control de gastos. Contar con una estrategia de control te permitirá incrementar las ganancias.

Conoce más…

CONTROLAR LOS GASTOS MEJORA LAS GANANCIAS

En cualquier empresa, independientemente de su tamaño y actividad, todos los días se realizan gastos, sin embargo, no siempre se lleva un adecuado control de éstos, lo cual puede disminuir las ganancias o en algunos casos, generar pérdidas.

Los gastos representan salidas de dinero que permiten el funcionamiento del negocio, pero algunos pueden resultar innecesarios o muy elevados. Resulta importante identificarlos para poder eliminarlos o disminuirlos, sin afectar la calidad del producto o servicio que ofrece.

A continuación, te presentamos algunos ejemplos de gastos para el funcionamiento de tu negocio:

Renta de local comercial

Pago de sueldos y salarios

Pago de servicios (electricidad, agua, telefonía, internet, otros servicios)

Publicidad y promoción

Productos diversos como: papelería, productos de limpieza y consumibles

Gastos de transporte, logística y gasolinas

Servicios de seguridad

Gastos notariales y de representación comercial

Gastos financieros (intereses o comisiones bancarias)

Para poder implementar una estrategia que te ayude a controlar los gastos y mejorar las ganancias del negocio, te sugerimos atiendas las siguientes recomendaciones:

1. Elabora un presupuesto. Es oportuno planear los gastos e inversiones que deberán realizarse a corto y mediano plazo y respetar ese plan

2. Identifica aquellos gastos que sean innecesarios o elevados para eliminarlos o buscar estrategias para disminuirlos, sin afectar el funcionamiento del negocio, por ejemplo: consumo de energía eléctrica o de telefonía

3. Asegúrate de que todas las personas que participan en el negocio conozcan y respeten el plan de gastos

4. Compara precios entre proveedores. Procura contar con más de dos cotizaciones de proveedores para encontrar el mejor precio y con la calidad necesaria

5. Evita mezclar los gastos del negocio con gastos personales o familiares. Una práctica muy común, es utilizar dinero del negocio para hacer pagos personales o familiares, lo cual lleva a un descontrol de los gastos propios del negocio.

6. Asigna un sueldo o cantidad de dinero fija para cubrir tus necesidades personales o familiares. Si las ganancias del negocio son insuficientes, evalúa si tu negocio puede crecer, o si son necesarias otras acciones para mejorar los ingresos.

Esperamos que estas recomendaciones sean de gran utilidad para disminuir el gasto y aumentar sus ganancias.

¿Problemas para identificar tu propuesta de valor? Aquí te ayudamos

Una propuesta de valor es el atributo de tu proyecto o idea, que te ayuda a diferenciarlo de la competencia.

¿Qué estás haciendo tú que tu competencia no? ¿Por qué los clientes te van a preferir a ti?

Ejemplo:

· Uber vs Taxi de sitio:

Uber te permite conseguir transporte sin salir a la calle con ayuda de un smartphone, conocer la identidad del chofer y tener una idea aproximada del costo de tu viaje. En comparación, un taxi de sitio no puede ofrecer ninguna de estas características.

¿Cómo identificas tu propuesta de valor?

Solo sigue estos 3 simples pasos:

Identifica a tus clientes potenciales y detecta sus necesidades

Analiza tu proyecto y encuentra la similitudes con tu competencia

Enlista todas las cosas que tú haces y ellos no para satisfacer las necesidades de tus clientes

¡Genial! ¡Ya tienes tu propuesta de valor!

Salidas vs tu tarjeta de crédito

Comer es un placer, uno de los pocos que podemos disfrutar solos o con la mejor compañía; cotidianamente puede ser algo sencillo solo para cubrir la necesidad primaria de alimentarnos, pero también puede llegar a ser el centro de eventos importantes en nuestra vida o la excusa perfecta para reunirnos con la familia y amigos.

Entonces la comida puede convertirse en el más importante y menos controlado de tus gastos diarios. Para evitarlo, compartimos contigo tres recomendaciones que te permitirán sacarle el máximo provecho a cada peso del presupuesto que destines a tus comidas personales y con amigos:

Compras inteligentes: Analiza antes hacer el gasto

Antes de ir de compras, revisa lo que tienes en el refrigerador o en la despensa; de ser posible elabora un plan semanal, quincenal o mensual de alimentación, tomando en cuenta lo que comerás en casa y lo que llevarás a la oficina. El objetivo es comprar sólo lo que vas a consumir y minimizar las visitas al supermercado, carnicería o mercado sobre ruedas.

Para evitar caer en la tentación de hacer compras innecesarias e incrementar tus gastos diarios, una buena idea es hacer una programación de menús semanal y así comprar solo los ingredientes necesarios para cada uno de ellos.

Incluye en tu menú: vegetales, snacks saludables, cereales, frutas y proteínas bajas en grasas. Compra ingredientes para ensaladas y platos que puedas preparar para la cena y comer al día siguiente y por qué no, también date permiso de algún placer culposo, como un postre o esa botana que tanto te gusta.

A la hora de pagar, checa las promociones del supermercado o tienda de comida, pues muchos de ellos cuentan con programas de lealtad y descuentos recurrentes para pago con tarjeta de crédito.

Programa tus comidas fuera de casa los días menos concurridos

No esperes al fin de semana para ir a tu restaurante favorito, comerte ese postre que tanto te gusta o reunirte a platicar con tus amigos. A comienzos o mediados de semana, seguramente encontrarás ese lugar que tanto te gusta, mucho menos concurrido que un sábado o domingo, y por esa misma razón es posible que ofrezcan promociones y descuentos. Consulta también si están afiliados a los programas de lealtad o recompensas de tus tarjetas de crédito.

En tus reuniones en casa: Combina tus recetas con tu servicio a domicilio preferido

Cocinar un menú completo para esa reunión con amigos o evento familiar, puede resultar complicado y costoso. Se vale tomar atajos: una opción que te recomendamos es pedir a domicilio una parte del menú, por ejemplo, la sopa o plato fuerte y reservar para preparar en casa las guarniciones como ensalada, frijoles, guacamole, etc. También puedes preparar esas botanas que a todos les gusta: hummus con galletas, quesadillitas, una bandeja de quesos y carnes frías o ese postre que te queda tan bien. Siempre decídete por opciones fáciles de preparar en casa y que te permitirán comenzar la velada con un toque personal de sabor y presentación para impresionar a tus invitados.

El plato principal, lo puedes ''delegar'' al chef de ese restaurante que tanto te gusta y pedir que te lo lleven a tu casa y no te preocupes si te excedes un poco en el cálculo de las porciones, pues puede convertirse en tu comida del día siguiente; eso sí, recuerda una vez más revisar si existe alguna promoción o bonificación disponible tanto en el menú como en la forma de pago, pues algunos restaurantes y servicios de envío a domicilio ofrecen descuentos para pagos con tarjeta de crédito.

Recuerda, la planificación y el tomar conciencia sobre cada peso gastado es una de las mejores prácticas para ajustar y respetar tu presupuesto mensual.

Para tener más control sobre tus gastos puedes realizar una tabla en Excel con tu presupuesto y los gastos mensuales por concepto de comidas, incluye alimentos a preparar, salidas a restaurantes, cafés del día, snacks, etc., esto te ayudará a visualizar de mejor manera cómo y en qué gastas el dinero.

Se trata de comprar y consumir de manera inteligente, pero también de hacer uso eficiente de las herramientas financieras que dispones para sacarle el máximo provecho a tu dinero, como tus tarjetas de crédito.

Empieza a invertir desde que empiezas a trabajar

Muchas personas adultas tienen estabilidad financiera porque empezaron a ahorrar e invertir desde muy jóvenes.

Es que iniciar pronto tiene muchos beneficios: se construyen mejores hábitos financieros, se puede planear en el largo plazo de forma adecuada, y se alcanzan con mayor facilidad las metas financieras. Un beneficio poderoso es que se pueden obtener intereses sobre intereses, lo que puede generar que el dinero se multiplique.

Para comprender lo anterior hay que saber que existen dos tipos de interés que podemos recibir cuando invertimos nuestro dinero, interés simple e interés compuesto. En el primer caso los intereses no se suman al capital inicial, mientras que en el interés compuesto las ganancias de cada periodo se suman al capital y se obtienen intereses sobre los intereses generados.

Veamos un ejemplo:

Supón que ahorras 10 pesos al día durante un año, ¿Crees que sea complicado? Al final tendrás $3,650, y que este dinero lo inviertes en un producto bancario que te da 7% por año y que además lo mantienes ahí durante 20 años.

Dice el tango que 20 años no es nada, ¿será? Cuando el interés es simple (el interés que ganas cada año lo retiras y no lo vuelves a invertir) tu capital en el primer año será de $3,650 y obtendrás $255.5 de interés (el 7% de $3,650). Como el interés no se agrega al capital en el segundo año tu capital volverá a ser de 3,650 y volverás a obtener de $255.5, por lo que habrás ganado en 2 años 511 pesos. En 10 años tendrías una ganancia de $2,555, y en 20 años de $5,110.

Cuando el interés es compuesto, en el primer año ocurrirá lo mismo que cuando el interés simple y a partir del segundo las cosas cambian ya que no retiras los $255.5 de intereses del primer año y se suman al capital del primer año ($3,650), por lo que el capital será ahora de $3,906. Así el interés del segundo año es de 273.4 y la ganancia acumulada en los dos primeros años de $528.9. Al décimo año habrás ganado $3,530 y en el año veinte $10,474, poco más del doble que en el caso del interés simple.

Dicen que cuando repetimos una acción durante casi un mes se convierte en hábito. Si continuamos ahorrando los 10 pesos diarios durante los 20 años y los vamos agregando a nuestra inversión año con año veamos qué ocurre cuando el interés es compuesto (el interés ganado también se invierte). A los $3,906 que teníamos de capital en el segundo año agregamos $3,650 de nuestro ahorro y lo sumamos a nuestra inversión con lo que tendremos un capital de $7,556, de lo cual se obtendrá un interés de $528.9, sumando este último valor con el interés del primer año, la ganancia acumulada en el segundo año será $784.4. De esta forma en el décimo año la ganancia acumulada será de $17,460.1 y en el año veinte de $87,107.9. ¡Nada mal!

Nuestro dinero se habría multiplicado de forma importante y lo que habríamos hecho son dos cosas: 1) Hacer del ahorro un hábito, y 2) Hacer de la inversión un hábito también. Como puedes ver, te conviene empezar a invertir pronto. ¡Empieza ya!

¿En cuánto tiempo duplicaré mi dinero invertido? La regla del 72

Una regla tradicionalmente utilizada por los financieros para saber en qué tiempo duplicaremos nuestras inversiones cuando obtenemos un interés compuesto, es la regla del 72, que si bien no es exacta sí nos da una cifra bastante aproximada. Consiste en dividir 72 entre la tasa de interés que generan nuestras inversiones.

Por ejemplo, si el interés que obtenemos es del 7%, como en el ejemplo que pusimos previamente, tenemos 72/7=10.29 años. En realidad, los 3,650 se duplican después del año 11, así que sí tenemos un resultado bastante aproximado con la regla del 72. Si obtuviéramos un interés de 4% nuestro dinero se duplicaría aproximadamente en 18 años (72/4). En cambio, si el interés obtenido fuera de 10% nuestro dinero se duplicaría en aproximadamente 7 años (72/10). Así esta regla puede ser muy útil para comparar inversiones con distintas tasas de interés.

Como verás en el caso de las inversiones es importante empezar pronto y cuanto antes mejor. Recuerda para ello investigar, asesorarte y tener una estrategia adecuada para tu estilo de vida y necesidades.

La 4ta revolución industrial: adaptándonos a los cambios del entorno

En los últimos años, hemos sido testigos del potencial que tiene la tecnología para mejorar nuestras vidas, desde aplicaciones que nos permiten programar un viaje en auto de manera segura, hasta la impresión 3D de prótesis que le dan una nueva esperanza a aquellos que no tenían independencia motriz debido a la falta de alguno de sus miembros.

Estos grandes cambios tecnológicos, forman parte de la llamada “4ª Revolución industrial”, la cual surge como una evolución natural del Internet de las Cosas (IOT Internet of things, por sus siglas en inglés), donde todo hardware (elementos físicos) está conectado con software (programas).

Amazon es un ejemplo donde se visualiza el poder de esta revolución; recientemente inauguró su primera tienda física, es innovadora en su tipo ya que no es necesario hacer filas para pagar los objetos seleccionados, el único requisito es registrarse al entrar con la aplicación de Amazon Go y por medio de cámaras y sensores, todo lo que tomas o devuelves se registra automáticamente en tu cuenta.

Una vez que estás seguro de las cosas que vas a comprar, puedes simplemente salir de la tienda y el recibo llega automáticamente por medio de la aplicación, sin la necesidad de pasar por una caja registradora.

Amazon nombró a esta tecnología: Just walk out (sólo camina hacia afuera).

La automatización de procesos como estos, sin duda nos da la posibilidad de invertir el tiempo en actividades que generen valor a nuestras vidas, pero ¿Qué pasa con los trabajos de las personas que son sustituidos por dichos avances? En el caso de la tienda de Amazon Go, ¿Cuántos empleos para cajeros dejan de generarse?. Estudios de Weforum, estiman que en menos de dos décadas, casi la mitad de todos los empleos se perderán a causa de la automatización.

Para hacer frente a ésta inminente problemática, se debe analizar la manera en que nuestra sociedad percibe el trabajo y cómo crea valor económico a partir de éste. Alejandro Ruelas-Gossi, describe en su artículo para el Harvard Business Review, un enfoque sobre cómo el mundo geoeconómico está dividido en dos: el del pensamiento y el de hacer.

El mundo del pensamiento, implica innovación y preparación constante para mantenerse al día de los cambios que ocurren diariamente, especialmente los tecnológicos, mientras que el mundo del hacer, se centra en realizar actividades de bajo valor, en el que se compite por ofrecer al menor costo el mayor volumen de productos y/o servicios, lo más rápido posible. Si analizamos esto, los empleos perdidos a causa de la automatización, son aquellos que tienen un enfoque en el hacer, y ante esta inevitable revolución, sin duda, muchas personas quedarán rezagadas.

Este cambio en la manera que percibimos el trabajo, es sólo una eventualidad de las muchas que la sociedad enfrentará en este mundo que se transforma mucho más rápido de lo que somos capaces de evolucionar como humanos, si bien nuestra vida se volverá más sencilla gracias a esta revolución industrial, entonces nuestra energía debería concentrarse en mejorar la calidad de ésta tal y como explica el Profesor Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial: “Se necesita un nuevo modelo de liderazgo responsable y receptivo que nos permita abordar los desafíos que el mundo enfrenta, desde la seguridad hasta la Cuarta Revolución Industrial, con un pensamiento a largo plazo y orientado a la acción, y mayor solidaridad a nivel nacional y global”.

Para lograr este objetivo, existen muchas alternativas que podrían acercarnos a la meta y una de ellas es el emprendimiento, pero no de cualquier tipo, lo que necesita el mundo son emprendimientos que puedan enfrentar problemáticas, es por esto que debemos migrar al mundo del pensamiento empezando por nosotros mismos. Aunque cambiar al mundo por medio del emprendimiento puede sonar abrumador e intimidante, generar ideas de negocio puede ser entrenado, ya que es el simple resultado de una serie de iteraciones e interacciones de la persona con su realidad exterior e interior, una realidad dada por la percepción, las experiencias, el conocimiento y la información a la que tiene acceso.

En el emprendimiento hallamos una nueva forma de liderazgo, en la que sus integrantes son aquellos inquietos por generar un cambio lo más rápido posible y que no están dispuestos a esperar a que las condiciones para lograrlo sean las adecuadas, estas personas son lo que muchas otras podrían llamar “idealistas”, cuando la verdad es que únicamente aterrizan lo que conciben como “un futuro mejor” a la realidad actual, para construir sobre ella y llegar a su meta.

Así que ¿cómo podemos prepararnos para los inminentes cambios que conlleva la 4ta Revolución Industrial? tal vez en la siguiente frase de Darwin encontremos la respuesta:

“En la medida en que en una comunidad se manifiesta la empatía entre sus miembros y se generan o descubren elementos afines entre ellos, los integrantes construyen un ecosistema mejor preparado para adaptarse a los cambios del entorno, y entonces sobrevivir y florecer.” - Charles Darwin

Bibliografía:

1 Andrew Chakhoyan. (02/02/2017). 5 soluciones o políticas para enfrentar el desempleo del futuro. 06/02/2017, de World Economic Forum Sitio web: https://www.weforum.org/es/agenda/2017/02/5-soluciones-o-politicas-para-enfrentar-el-desempleo-de l-futuro?utm_content=bufferae89a&utm_medium=social&utm_source=facebook.com&utm_campaign =buffer

2 Alejandro Ruelas-Gossi. (NOVEMBER 09, 2016). Why Mexico’s Economy Doesn’t Depend on the Next U.S. President. 06/02/2017, de Harvard Business Review Sitio web: https://hbr.org/2016/11/why-mexicos-economy-doesnt-depend-on-the-next-u-s-president?utm_campai gn=HBR&utm_source=facebook&utm_medium=social

3 Ceri Parker. (12/01/2017). Todo lo que necesitas saber sobre Davos 2017. 06/02/2017, de World Economic Forum Sitio web: https://www.weforum.org/es/agenda/2017/01/todo-lo-que-necesitas-saber-sobre-davos-2017/

Vete de viaje sin gastar de más

Sea de trabajo o de placer, una maleta que contenga todo lo que realmente necesitarás en los días que estés fuera de tu casa es parte importante de un viaje perfecto.

Al tener un equipaje ligero y funcional te ayudará a ahorrarte gastos adicionales como: extras en las aerolíneas, renta de carritos o propinas a las personas que ayudan a transportar tu maleta; así como también lo agradecerá espalda, que se librará de cargar o arrastrar tanto peso.

El medio de transporte que usarás, el clima en tu destino, el número de días que estarás fuera, el sitio en el que dormirás, si es un viaje de trabajo o esas vacaciones que has planeado durante tanto tiempo, son algunas de las cosas que debes de considerar antes de empacar.

Compartimos contigo 6 tips para que tu equipaje sea el complemento perfecto para tu experiencia de viaje:

El destino, define tu equipaje y cuánto puedes llevar

¿Te conviene llevar un Carry-On, una mochila extra-grande o una maleta gigante? La respuesta correcta depende del objetivo de tu viaje y el lugar al que irás. Si es un viaje de negocios obviamente deberás llevar más ropa y calzado formal, pero considera también los tiempos muertos que pudieras tener para incluir en el equipaje los outfits necesarios, como, por ejemplo; un traje de baño para relajarte en la alberca del hotel después de esa junta importante.

El clima y el tipo de lugar también son importantes a la hora de empacar; si es un destino cálido servirá llevar ropa ligera, clara y vaporosa, si por el contrario es frío deberás llevar ropa térmica, botas y chamarra contra el frío. En este último caso, un tip que te podemos dar es utilizar bolsas ''ahorra espacio'' (de esas que se usan para las colchas) para colocar todo lo voluminoso y ponerlo en la parte baja de la maleta.

Lleva sólo lo que realmente usarás

Evita la tentación de colocar en tu maleta ropa o zapatos que tienes en tu closet desde hace mucho tiempo, pero que nunca has usado; lo más probable es que no lo uses tampoco en tu viaje y termine por convertirse en una carga innecesaria.

Planifica el contenido de tu maleta

Días antes de empacar, prepara una lista de esas cosas que es imprescindible llevar, para que puedas revisarla y checar si falta o debes agregar algo más. Ropa, zapatos y hasta los artículos de higiene personal: organiza lo que vas a usar cada día y lleva sólo eso. Recuerda, que en el destino que sea, siempre tienes la posibilidad de usar tu tarjeta de crédito para comprar eso que olvidaste o decidiste dejar fuera de tu equipaje y realmente necesitas.

Tómate tu tiempo

Coloca sobre la cama todo lo que vas a llevar, para que visualices cada uno de tus atuendos y puedas determinar si alguna de las prendas funciona para más de una combinación. Toma en consideración:

- Incluir colores neutros, fáciles de combinar. Considera que un pantalón en color neutro puedes utilizarlo para formar varias combinaciones, con dos o tres camisas o blusas diferentes.

- Agrega accesorios funcionales. En el caso de las mujeres un par de chalinas o collares en tonos distintos, es una buena opción para darle variedad y elegancia a tu look.

- Coloca uno o dos pares de zapatos cómodos y que combinen con varios de tus atuendos. Recuerda, considerar también los que lleves puestos al momento de viajar.

- Incluye artículos de higiene personal en cantidades mínimas y envases pequeños.

Optimiza el espacio

Aquí la experiencia hace al artista; sin embargo, queremos compartirte algunas buenas prácticas de viajeros experimentados en la preparación de equipaje:

- Coloca las piezas más pesadas en la base y a los lados de tu equipaje, de manera que le den soporte al resto de tus cosas; y si se trata de objetos frágiles como botellas de vidrio, colócalas en bolsas plásticas y luego envuélvelas en ropa gruesa o toallas para evitar que se rompan.

- Maximiza los espacios: Coloca dentro de tus zapatos calcetines, accesorios y bufandas.

- Utiliza bolsas de plástico para envolver todo lo que pueda derramarse, ensuciar o manchar tu ropa (incluso los zapatos y artículos de higiene personal); si es posible incluye un par de bolsas plásticas extra y una maleta portátil adicional.

- Lleva en el equipaje de mano, además de tus documentos personales (identificaciones y tarjetas de crédito), las piezas más voluminosas como chamarras, paquetes o regalos, así como cargadores y accesorios de tus equipos electrónicos, pues ocupan gran cantidad de espacio en la maleta que vale la pena ahorrar.

Lleva en digital todo lo que no sea indispensable imprimir

Si tu viaje es de trabajo, considera llevar impreso sólo lo que es indispensable para tus reuniones; para los documentos de apoyo o referencia puedes recurrir a versiones digitales o, si es necesario, imprímelos en tu lugar de destino.

Si se trata de un viaje de placer, lleva copias impresas de todos los documentos de identificación y respaldos de tus reservas; pero también en versiones digitales a las que tengas acceso desde tu Smartphone o computadora... y si de guías de viajero se trata, descarga las versiones digitales y combínalas con los mapas y guías gratuitos que ofrecen las oficinas de turismo, hoteles y sitios de interés en cada destino.

Recuerda, el objetivo es viajar con un equipaje ligero tanto como sea posible, incluyendo en él sólo lo que sea realmente necesario para vivir la mejor experiencia. Para imprevistos y gastos no planificados, siempre tienes la opción de usar tu tarjeta de crédito.

Eso sí, trata de que la tarjeta de crédito que utilices en tu viaje esté afiliada a programas de lealtad, ofrezca beneficios cuando sea usada en viajes o con la que acumules puntos por consumos en el exterior.